¿Qué son las mezclas bordelesas?

También llamados Bordeaux blends, mezclan al menos dos variedades tradicionales de esta región de Francia. Es una de las combinaciones más famosas del mundo y también la prueba de que, en ciertos casos, el arte del ensamblaje es clave para obtener vinos excepcionales.

Seguramente ya oíste hablar de los vinos de Bordeaux, o Burdeos en español. Es la zona vitícola más famosa de Francia, ubicada al sudoeste del país y atravesada por el río Garona, donde cada año se producen unos 900 millones de botellas al año. Burdeos también es el hogar de famosas bodegas como Chateaux Lafite, Mouton Rothschild, Margoux, Latour y Haut-Brion, quienes crean vinos siguiendo la estricta apelación del sistema francés que, en el caso de Bordeaux, origina mayoritariamente mezclas tintas y en un pequeño porcentaje mezclas blancas. 

Pero más allá de la apelación francesa y sus tecnicismos, cuando hablamos de “mezcla bordelesa” o “Bordeaux blend” no es más que para referirnos a un vino que mezcla variedades de uva tradicionalmente bordelesas, pero sin seguir una norma sobre los porcentajes de la mezcla, ni menos cómo se trabajan los viñedos que, por cierto, no necesariamente están en Francia.  Un buen ejemplo es Marques de Casa Concha Heritage 2021, proveniente del Valle de Alto Maipo (probablemente la mejor zona para la producción de Cabernet Sauvignon en Chile), que reúne un 76% de Cabernet Sauvignon, un 24% de Cabernet Franc y en algunas cosechas un pequeño porcentaje de Petit Verdot. ¿El resultado? Un vino de gran complejidad aromática, con notas a cereza, cassis, cedro, mora y tabaco. De textura suave, casi sedosa y una estructura tánica firme, es ideal para acompañar carnes rojas y de caza a la parrilla.

Variedades en mezclas tintas y blancas

En el caso de las mezclas bordelesas tintas, las variedades predominantes son Cabernet Sauvignon y Merlot, que luego se complementan de otras uvas como Cabernet Franc, Malbec, Petit Verdot y Malbec. A veces, también puede incluirse un pequeño porcentaje de Carmenère. Dando como resultado vinos de cuerpo medio a robusto, por su notable presencia de taninos, cuyos aromas dependen de las variedades utilizadas. Notas a grosellas negras, cassis, cerezas, fruta madura o fresca, grafito (entregado por el Cabernet Franc), mineralidad, aromas aportados por la guarda en barrica y taninos firmes que ayudan a que estos vinos puedan guardarse y envejecer por años, son algunas de las características de las mezclas bordelesas tintas. En el caso de Marques de Casa Concha Heritage 2021, por ejemplo, su potencial de guarda es de unos 20 años. 

La particularidad de estos vinos es el resultado que se logra tras la mezcla, donde la combinación de dos o más variedades, consigue que el vino final sea mucho más interesante que las variedades por sí solas. Mayor complejidad de sus aromas y sabores, mayor estructura, además de un mayor potencial de guarda son sus principales cualidades.

Cuando hablamos de mezclas bordelesas blancas, en ellas predominan el Sauvignon Blanc y Semillón, que se complementan con otras variedades nativas de Burdeos como el Sauvignon Gris o Muscadelle. En la región de Burdeos estas mezclas corresponden solo al 10% de la producción, mientras que el 90% está destinado a las mezclas tintas. De todos modos, mucha gente gusta de estas mezclas blancas que ofrece vinos blancos secos como dulces (Sauternes), ofreciendo una gama de opciones que se pasea por vinos ligeros y frutosos, hasta deliciosos vinos cremosos y con sabores que recuerdan a la miel. 

Alrededor del mundo, la influencia de Burdeos ha sido principalmente en el mundo de las mezclas tintas. Estas han dado origen a millones de versiones alrededor de todo el mundo, donde los diversos tipos de clima y suelo han permitido crear versiones que reflejan el terroir de cada zona vitícola. Marques de Casa Concha Heritage, en este caso, proviene de un viñedo con características fantásticas y muy similares a las del viñedo de Don Melchor, garantizando excelencia y calidad. ¿Ya lo probaste?